Si me dice que no, que le cueste,
que no sea por falta de poesía,
que no sea porque no le hablé con el alma,
y aunque no sepa por que sea,
que no sea porque no vio mi ser
cruzando en un hilo el acantilado hasta su ser,
si casi siempre de un momento inesperado nace todo,
de un momento esperado muere todo,
al fin y al cabo, quien sabe quién soy,
se queda porque dije lo mismo que a ella,
fui un buen sincero,
nada más que eso.
ni
menos.
peligrosamente tierno...me gusta tu pluma, es bien auténtica y novedosa.
ResponderEliminarPodrías cantarle a cosas más cotidianas usando esa retórica, tal vez surgiría algo hermosamente macabro.
Cariños!